Dulce pecado
Deseo que se convierte en divino,
cuando atraviesa los poros
y duerme en mi ser,
haciéndome caer.
Mirada lasciva
que incita a pecar,
con el roce de las manos
que se pierden en la piel.
Ardiente sentimiento
que calcina los miedos,
haciendo temblar
nuestra realidad.
Preámbulo de fantasías
que se dejan ver
en cada amanecer,
Comentarios
Publicar un comentario