En la penumbra

En el silencio de la noche se perdían los pasos ligeros al encuentro de labios, que ardientes, esperan en la penumbra.

Una mano que tira hacia la felicidad, mientras recorren la geografía explorada ya tantas veces, pero sigue siendo excitante placer.

No hay palabras que describan tan intenso momento, donde los pechos acelerados y la respiración jadeante hace presa de almas pasionales.

Se desata el frenesí, "eso" que no se explica, solo se siente y recorre de arriba abajo, pieles donde afloran fantasías censuradas.

Ignorando al mundo se entregan, como si fuese la última vez que el roce de sus instintos, se diera.

Apasionados, entregados a lo que sienten, un deseo puro e intenso que los lleva a los límites de la imaginación.

Tal vez una voz, unos pasos, los devuelven a la realidad, pero las manos entrelazadas son difíciles de separar ... hasta la próxima vez.

Rostros de felicidad con cómplices miradas que se vuelven caricias que erizan de nuevo esas espaldas que recuerdan momentos.

Tú, mi Universo

Atrapé a la luna en un suspiro,

para que ilumine el camino que me ha perdido,

robándole su paz,

para convertirla en mía.

Retengo algunas estrellas,

para dibujar el rostro que me consuela,

y que el mundo sepa

que eres para mi.

Me aventuré a tocar el sol,

para que calcinara  mis miedos,

esos que me torturan

haciéndome pensar que te perderé.

Detuve mi viaje al infinito,

que prometía ser mejor,

con la esperanza que tus labios

rozaran los míos.

No importa lo que haga,

ni lo que pase,

solo me basta saber

que te puedo tener.

 

Alma cándida

Ingenua criatura,

que vivía de las fantasías,

donde todo era posible

y nada la hacía sufrir.

Entregada por completo,

negando su alrededor,

feliz vagaba por el mundo

que la hacía crecer.

Siguiendo una estela de luz,

dejándose llevar,

encontró la inmortalidad

en una alma perdida.

Ahora, embelesada

se detiene su corazón,

cuando esos luceros

se clavan en ella. 

Testimonio de amor

Esencia de amor

que se extiende en tu piel

que me cautiva y desboca

convirtiendo mis venas

en desatado frenesí.

Detalles que endulzan

una existencia

llena de miedos y tristezas,

haciendome pensar

que aún hay tiempo para mi.

Conjugación perfecta

de almas encontradas

en un frágil mundo,

perdido en tabúes

que atan lo vital.

Mientras, nosotros liberados

expresándonos al ritmo del amor,

que nos permite ser tu y yo,

donde el resto del mundo

se vuelve invisible.  

Dulce tormento

Algo sangra por dentro

con tanto revés,

cuando todo se evapora

y el destino se ríe frente a mi.

¡No hay nada que hacer!

parece que siempre va a suceder,

no se puede cambiar

esa voluntad.

Mientras se ahogan

besos atrapados en el tiempo,

que pacientes esperaran

hasta la próxima vez.

Inmutable se mantiene

todo lo que les ata,

hasta que por fin

el corazón deje de latir. 

 

Anhelando tu amor

¿Por eso será?

será el destino el que me evita pecar,

el que me aleja una vez más,

para tenerte que extrañar y así volver a empezar.

Golpea de nuevo tu indiferencia,

que rompe mi alma sin pensar,

me atas las alas que ansían volar,

tras esa aventura que invita a soñar.

¿Qué queda ahora?

fragmentos de deseos, 

esparcidos por donde mi corazón llora,

aguardando que descubras mi amor.

Nostalgia de amor

Cierro los ojos, te tengo frente a mi,

puedo tocar tu cuerpo,

oír tu dulce voz,

sentir el calor de tu ser.

Quiero pensar,

que en este mundo es posible poseerte,

que no hay barrera limitante 

entre nuestros cuerpos.

Necesito creer que estoy hecha para ti,

que el encontrarnos 

no fue capricho del destino,

que tendremos una historia con final feliz.

Pero abro mis ojos y me doy cuenta,

una vez más estoy soñando despierta

y en esta vida,

nuestros rumbos tienen caminos distintos.

En contra de la razón, el corazón

Contradicciones del destino, las cosas buenas le superan pero el corazón insiste por otro camino, no escucha a la razón, de que sirve eso, si no te brinda la felicidad.

Es un detalle tan insignificante pero parece que baja las estrellas para ti, eso es la diferencia.

La distancia disipa las dudas de lo que hace sentir, no importa nada, simplemente saber que estas ahí.

El destino se acerca

Dicen que el tiempo lo cura todo, espero que pronto todo esto sea solo un vago recuerdo en la memoria.

Pasos que pesan, pero que hay que dar para poder avanzar hacia el siguiente nivel, libertad.

Donde a partir de ese momento no hay vuelta atrás, ni cabida para momentos oscuros, solo será bienvenida la felicidad.

Poco queda de lo que fue, hoy solo es compañía , como podemos seguir así.

Preparar el camino de lo que se avecina, de ese trago que sabrá a hiel, pero evitará un mayor dolor.

El corazón ha partido a puertos lejanos, donde navega sin cadenas y se lanza al vacío sin miedos.

Esta historia se acaba, se escriben los últimos capítulos, los mas amargos descritos.

Pueda que no tenga corazón, que sea infame con todo, pero es lo que me dicta el espíritu que atrapado vive dentro de mi, gritando que quiere salir. 

Misivas desordenadas XII

22

Se acerca el momento de que los labios se unan y nuestras almas se junten para crear un sueño que sea de amor intenso y profundo que se cuele hasta los huesos haciendo que nuestros cuerpos no se separen.

23

Tiemblo en la espera de un reencuentro, parece lejano pero ya está aquí. 

¿Te digo mis miedos o muero con ellos?

Se acerca el presente de un sentimiento que parece marcado con el sufrimiento. 

Misivas desordenadas XI

20

Se acorta la espera crecen las ansias y se dispara la imaginación, no se que ocurra ni que padezca, pero mi corazón late rompiendo los esquemas.

Si tus besos no me mienten, si tus ojos se declaran, que importan las palabras vacías que arremeten.

21

Vuelta a la rutina que tanto ansío, que inunda mis días oscuros y vacíos, donde ese rayo de luz proviene de tu sonrisa, de esos ojos que me miran con especial deseo.

Todo vuelve a su cauce donde se inicia una pasión desbordante que cubre mi cuerpo de caricias deseadas.

Besos ardientes en una piel que espera perder sus detalles con caricias prohibidas.

Misivas desordenadas X

18

Se cubren los sentimientos de temores infundados. Que tus pensamientos se liberen de mi y me olvides por un momento. Si eso pasa ... se volverá todo gris y mi camino un recorrido sin fin.

19

Detener la espiral que me atrapa, esperando que todo gire en torno a mi, desatando a quien ose mirarme, crear la necesidad solo con la finalidad de que si te pierdo me ayuden a olvidar. 

Un ser sin corazón que pide amor sin tener razón.

Misivas desordenadas IX

16

Calma en el tiempo, deseos que vuelan, conciencia que calla.

El destino cambia pensamientos de ayer, que ahora son vestigios de un querer que terminó sin cuenta darse el corazón que se entretenía con las margaritas deshojadas por el camino.

17

Transportada hacia un futuro que veo tan cerca de ti, puede ser ingenuidad o realidad, pues no sé  donde los pasos nos llevarán, parecen que juntos viajan por un camino lleno de sorpresas sin saber hasta donde nos acompañará.

La incertidumbre no hace mella en lo que provoca en nuestra alma, simplemente nos dejamos guiar.

Misivas desordenadas VIII

14

Inconsciente del destino me alejo de Morfeo, haciendo que mi mente me transporte hasta ti. 

Una imagen que revoluciona mis hormonas queriendo comerte hasta saciar mi deseo.

Como no quererte si me brindas felicidad y me haces pensar en la eternidad.

15

Vuelven las sombras a los sueños de amor, temiendo que sea una película de terror.

Que en un suspiro acabe la ilusión forjada con cada beso de labios de miel.

Que me quede sin lo eterno de esas fantasías que escribes en mi piel.

Misivas desordenadas VII

12

Sombras que cubren este corazón que alegre palpita, sin imaginar siquiera lo que puede esperar.

Palabras perfectas y justas que quieren hacerme volar hacia ese paraíso, que solo yo parezco habitar.

Decir te quiero se hace tan fácil si imagino tu rostro ante mi,  luego un profundo vacío enmudece mi ser.

13

Conectados por el deseo en una red de pasiones que me llevan a la libertad, que vuele la mente hasta el extremo que siento el calor que irradia tu cuerpo cuando vibra junto al mío, se acelera la respiración y se estremece la piel haciendo que mane el elixir del amor.

Misivas desordenadas VI

10

Vuelve la nostalgia de estar separada de tus labios, esos que me suben al cielo y me pierden en el abismo de la lujuria.

Sueño de nuevo con las fantasías que creamos cuando nuestros cuerpos se conjugan sin piedad.

Así, vuelve a empezar mi realidad.

11

Tus manos bajo mi ropa, que no te ofrece resistencia, buscas ese camino que me hace vibrar.

Tu rostro me hipnotiza, tu boca me pierde y tus ojos se vuelven pasión, esa que llena nuestros cuerpos de una seducción que nos hace caer en la tentación de tenernos una vez más.

Misivas desordenadas V

8

Necesito una prueba de que esto es real, no producto de mi imaginación, algo que me diga que no es un juego, que me demuestre fehacientemente lo importante soy para ti, que no hay nadie más en tu cabeza.

Se que no es amor, si acaso un querer, un deseo que quema tu piel, un no se que , pero al fin y al cabo un sentimiento que nos une un poco más.

9

Quiero que desaparezcas, que todo rastro de ti se borre para permitirme actuar con la razón.

Que se borren tus besos, las caricias en mi piel, tus palabras de miel.

Olvidar que te conozco que una historia pudo existir, dejar que el tiempo te traiga si serás mío o que me olvides como triste hoja que se marchita sin piedad.

Misivas desordenadas IV

6

Me he propuesto no preguntar lo que no quiero saber o lo que no estoy preparada para afrontar.

Decido no sufrir por lo que pueda pasar, pues ya no dolerá.

Intento no pensar, si al final, a mis brazos llegará.

El mundo sigue y yo con él, esperando que todo se alinee y me muestre su bondad.

Detener un corazón que acelerado vuela en busca de abrazos que le consuelen.

7

Otra vez la calma, esa que me inunda tras la tempestad de deseos reprimidos.

Tan sencillas palabras bastan para frenar ese frenesí que ahora navega sosegado por las venas ardientes de deseos.

No sé cuando te tendré o si eso vuelva hacer posible, el tiempo avanza y no se en que corriente navegamos y no sé si las promesas se pierdan en la inmensidad del destino.

Misivas desordenadas III

4

No sé lo que quiero sentir, lo que quiero pensar, ni lo que quiero hacer, solo sé que vives ahí incesante en mi.

Cada momento con un pequeño detalle, siempre vuelves, se que el tiempo dejará que todo caiga por su propio peso, no me importa, si esto debe terminar yo quiero ser feliz mientras te tenga.

No sé si mientas o no me quieras o por lo menos no como yo quisiera, pero las frases dulces me llenan de ilusión aunque pueda que al final hieran mi corazón.

Sé lo que debo hacer, por mi... te quiero mucho

5

Parece que estamos conectados, que nuestro mundo se une en algún extremo y rondamos por el mismo lado.

Se liberan los instintos que me hacen buscarte para poderte  llevar hasta el fondo de mi ser. 

Sin preámbulos, solo besos que te sepan a miel ... hasta la próxima vez.

Misivas desordenadas II

2

 

Lograste herir mi corazón, cuando no esperé que lo hicieras, en mi cabeza muchas ideas y ninguna resuelta, sentimientos encontrados en el abismo de los miedos. 

Decidí que acabaría, que todo quedaría atrás, pues no sabía que pensar, de pronto una palabra que todo cambió, haciendo de nuevo que muera de amor.

¡Idilios duraderos! mientras yo, en cambio ... no dependen de mi, soy un número en la vida de otros, que ya es difícil decir. 

Sin rencores ni reclamos, esto va a continuar así.

3

Me voy con la sensación que todo fue mentira, un corazón caducado y lo nuestro olvidado.

Que las palabras saben a nubes que envolvieron la razón y ahora toca el desamor.

Intentar detener lo que se escapa, sin saber por que de esa boca salieron frases de amor.

Comprender que el sueño terminó.

Misivas desordenadas I

Cuando tu mundo se vuelve convulso, no sabiendo que esperar o pensar, cuando lo cierto se convierte en mentira y las mentiras en verdad, cuando todo gira y tu inmóvil lo ves pasar, cuando todo esto se une, hacen que surja la necesidad de escribir cartas posiblemente sin destinatario, fragmentos que sepan a paz.

1

No es justo, las comparaciones son odiosas, pero incesante tu presencia viene a mi, tuve que partir con mis miedos y herida, sin poder traerte conmigo; pero aunque no quiera, cada cosa me recuerda a ti, quisiera vivirlo contigo o volverlos a vivir ... que tonto suena ahora.