Cuando se hace eterno

El tiempo se detiene para que el dolor no aprisione la sonrisa que ilumina tu rostro, no vale la pena las lágrimas en hermosos ojos si no son por felicidad.

Intentar borrar caricias, recuerdos y palabras se hace difícil pero un día llegará, donde esa parte de la memoria se borre y sea invisible.

Destinos innecesarios para un corazón que sufre por un error que partió su alma y luego vuela en contra sentido dejando todo atrás.

No volver a caer es la consigna de unos labios que ansiaron perderse en la inmensidad de tu piel pero que ahora rechazas sin palabras.

Una vida que te empeñas en seguir a pesar de que estas ausente y las cosas maravillosas no las aprecias como antes.

Cada uno vive su error de la mejor manera, aunque  las muescas siguen en la piel y por ahora no consiguen cerrar un capítulo inexistente.

Volar libre con la imaginación para limpiar los amargos recuerdos de un traspiés.