Escarcha en los sentimientos

Y entonces llegó la realidad, esa que días atrás la ocultabas tras la venda que cubrió tu corazón.

Lento te deslizas sobre ese camino que se abre ante tus ojos con un nuevo amanecer.

Para encontrar por él, esa recóndita certidumbre de lo que pudo suceder y ahora dices ¡adiós!

Te liberas, te regocijas de evitar heridas que podrían haber sido peor y sin embargo, te queda un resquemor.

No acaba tu malicia, sigues agazapada esperando actuar, sacando tus armas que te hagan eclipsar.

Coqueta avanzas robando a tu paso la respiración de todo aquel que te ose mirar, sin que eso te pueda importar.

Que mas da las historias escritas en la piel, siguen siendo anécdotas que adornan fantasías vacías.

Ahora ... te despiertas para vivir de los recuerdos, sigues siendo ese aterido río que navega a su voluntad.