Sacrificios en el camino

Tras los muros de la indiferencia veo tu rostro, ese que días atrás iluminaba mi existencia.

Que efímera la vida que en un segundo cambia los papeles para hacernos ver lo volubles que podemos ser.

Pensamos ser eternos y de pronto damos vuelta dejando todo atrás, siguiendo otro rumbos que nos llene de ilusiones.

No podemos cambiar los sentimientos, si estos no crecen cuando queremos, solo nos queda disfrutarlos cuando los tenemos y luego continuar.

Muescas en el camino que andamos en este mundo infinito, donde el destino nos lleva donde late el corazón.

Los colores que iluminan ese sendero, palpitan dentro de cada gesto que recibimos  a lo largo de él.

Las culpas son los reproches de las excusas que creamos para poder sobrevivir al dolor que nos causa la perdida.

Son como gotas que limpian las heridas para hacernos levantar y continuar por el sendero de la felicidad.

No es lo que sucede, es como lo enfrentas, el dolor siempre estará pero de ti depende cuanto dure.