Redimida
Atada a los miedos
dejó un momento
de existir...
solo para sufrir.
Pensaba
que "era normal"
sentirse perdida
sabiendo donde está.
Creía que ese sentimiento
de soledad
a pesar de estar rodeada,
era lo habitual.
Hasta que descubrió
que hay un más allá
del dolor y miedos,
junto una mano extendida.
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