Todo acabó en un instante
sin motivos aparentes,
todo se rompió
dentro de tí.
Atónita divagaste
cada segundo
de esas 24 horas,
desde donde partiste.
Pero a pesar de ello
cicatrizaste las heridas
en veintiún días,
dejando todo atrás.
Ahora recompones
esa existencia
que parece vacía
pero te llena de fe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario