Un beso

Tus manos,
aprisionando mi melena,
mientras nuestros labios
se acercaban,
en busca del néctar prohibido.

El mundo ... se detuvo,
los miedos, escaparon,
entregados en un beso,
el preámbulo
de mis misterios ... 

Luego, la noche,
dejó caer todo aquello
que ataba,
esa ardiente pasión
que calcinaba mi piel.

Como enredaderas,

manos y labios,
recorriendo caminos,
deseosos de ser descubiertos
por nuevas emociones

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