Psicoanálisis de un amor
Capítulo II
En apogeo
- Te lo dije, que esto no funcionaría, hoy estoy más "activada" pensando en él, tanto que rozo el acoso.
- No te quejes tanto, verás que si funciona, continúa...
- Esta bien, pero lo sigo viendo inútil.
Imagínate, ya desde que todo empezó llevamos ya dos años y no he avanzado nada, no por que no lo piense, es por que me da miedo.
Miedo a perderlo, alguien podría pensar que "no puedo perder lo que no es mío", pero su amistad si es mía y eso no lo quiero perder, hombres al fin y al cabo, hay en todos lados, pero su amistad, significa mucho, aunque nunca pase nada, prefiero idolatrarlo a escondidas que perderlo por un desliz tonto e inoportuno.
El sentimiento se fue acrecentando, tanto que se coló en mis sueños, que viví como si fuera una realidad.
Uno de ellos fue:
" Habíamos quedado para ver unos documentos en su oficina, enfrascados viendo la pantalla del ordenador, cuando me giré, nuestras caras quedaron a escasos milímetros, mi corazón se aceleró y creo que hasta me ruboricé, nos miramos y nos alejamos sin decir ni hacer nada".
Pero al despertar mi cuerpo temblaba como si en realidad hubiese pasado.
Cuando me buscaba, me pedía algo o lo que fuera, para mí significaba una esperanza de poder llegar a poseerlo algún día.
Me inventaba excusas para poder quedar con él, por la tarde, prolongando la despedida hasta más no poder por compratir esas horas con él.
Sinceramente, nunca me ha dado motivos concretos para pensar que yo le intereso como mujer, pero mi loca cabeza se armó su propia realidad paralela para creerlo así.
Es con la única que ha bailado cuando hemos salido, me toma encuenta para las salidas, está pendiente de mí, que posiblemente con el resto de las mujeres igual, solo es caballerosidad y yo lo tomo como me interesa, pero eso me mantiene viva.
A veces pasan las semanas sin vernos y cuando hay un reencuentro, con solo ver su coche mi rostro esboza una radiante sonrisa y cuando le veo mis ojos se iluminan.
¿Él lo sabrá? con certeza no lo sé, ¿se lo imagina? ... podría ser, pero no hará nada para cambiar nada, al igual que yo.
¿Entonces, a qué juego o que busco? felicidad, simplemente, él me la brinda al compartir momentos, que me llena y con las fantasías me hace vibrar, tonto, lo sé, pudiendo disfrutar a plenitud con alguien que si me corresponda, pero, así soy yo!
Otro sueño, que fué tras verlo una tarde:
" Como siempre quedamos, para tratar de arreglar algo, me preguntó que si había llevado algo dulce, lo miré y respondí: te sirve esto ... dándole un beso, me tomó de la cintura, me subió a la mesa y mi blusa no se resistió a sus manos, la respiración se agitaba y el pecho parecía un volcán a punto de erupción, nos detubimos ambos, como si algo nos decía que no debíamos seguir .... Justo nos vino, para arreglar nuestras ropas y yo irme hacia la ventana, cuando entró alguien al despacho".
Así una y otra vez, en mi soledad cuando las fantasías vuelan siempre a su alrededor, estaré loca, obsesionada, que se yo.
Ayer le ví, hoy imagné que bajaba de su coche se acercaba y me decía:
- "algún día lo sabrás", deslizando su dedo en mi torso.
Lo sentí tan real, que mi corazón se aceleró y esa sonrisa de nuevo acudió a mi rostro.
¿Hasta cuándo estaré así? ¿Cuánto durará esta vez? ¿Simple obsesión?
Puede que sea de todo un poco, puede que si algo pasa, yo me aleje, puede que dure otros doce años o se acabae mañana, pero así estoy viviendo ahora.
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