Ese cuerpo ... es mío

Un cuerpo desnudo tumbado en la cama, donde muchas manos se posan sobre el, parece que se trata de todos aquellos seres importantes que llenaron su mundo en un momento dado.

Se abalanza sobre ella intentando poseerla, no hay hueco que rellenar y los que llegaron primero son los que más afortunados en tener esa parte que los hace soñar.

Como un juego intercambian posiciones para deleitarse de todos los ángulos de esa piel suave y tersa que invita al pecado.

Se estremece se contonea elevando el éxtasis entre todos ellos en ese desenfreno donde el tabú y remordimientos quedaron fuera mezclados con las prendas.

Seductora y ambiciosa que embruja con un beso y donde su calor atrae al restos de cuerpos celestes que rotan en sus lunas misteriosas, sus cavernas inmensas y dunas esculpidas.

Una luz detiene el pensamiento ... esa luz que descubre ese cuerpo ... que es el mío.