La mala de la película

Se dirigía dando un paseo, para buscar el vestido que llevaría a la fiesta, iba tan ensimismada  que al llegar  a la esquina casi se da de bruces con ella, al principio no la reconoció, hasta que ella dijo:

¡Tenemos que hablar!

Era Aurora...

- Estás segura, ¿que quieres hacer esto?, dijo Violeta

- Si, lo necesito ...

- Esta bien, vamos a ese café y hablamos

Entraron a un café cercano, buscaron las sillas más alejadas y se sentaron.

- Tu dirás ...

- Una simple pregunta ¿por qué? eres una descarada

Aurora, era la pareja de Sergio, un desliz que meses atrás Violeta había tenido

- Mira, se que nada de lo que diga podrá borrar el daño que te hice, pero también  quiero que sepas, que eso terminó mucho antes de que te enteraras.

Se  que lo que yo pueda decirte hoy removerá otra vez todo ese dolor, pero es la verdad.

Cuando todo ocurrió, ambos estábamos en nuestras horas bajas, con carencias de distinta índole pero al final de cuenta carencias, que cada vez que las hablábamos, nos parecía que girábamos en el mismo sentido y eso fue lo que hizo que pasara toda esta historia.

Dos meses, no duró más, nos llevábamos bien, pero sabíamos que eso no sería eterno, tenía fecha de caducidad, por muchas razones.

A pesar de lo que hayas podido encontrar, esas solo eran palabras, fantasías, ya nada era real, teníamos tiempo de no vernos.

Créeme, él está muy arrepentido, te quiere y mucho

- Si, y por eso me puso los cuernos

-Mira, hoy se ha dado cuenta, abrió los ojos y sabe que con quien quiere estar es contigo, una de nuestras charlas, era que deseaba cambiar de aires, casa, dejarlo todo, no por mí, eso sabía que no pasaría.

Cuando decía esto, la cara de Aurora se tornaba de mil colores parecía que estaba a punto de estallar, pero no dijo nada.

- ¿Qué mejor momento? este donde todo estaba por el suelo, para tomar esa decisión, pero no lo hizo, quiere estar contigo.

Ya ni nuestra amistad existe, todo es siniestro total, eso es lo que echo en falta.

El sexo no era lo primordial, fue un complemento, nada más.

No sé si todo esto que te he dicho empeore o mejora vuestra situación ... pero, si te hago una pregunta a ti:

¿Piensas estar el resto de tu vida mortificándote por si puede volver a suceder algo o vas a perdonar y creer en su arrepentimiento para volver a construir lo que tenían?

Violeta, se levantó, pagó la cuenta y se marchó en busca de su vestido y con la sensación de quitarse un peso de encima.