Abriendo los ojos
Seguía de pié, sin vida en la puerta. Él se despidió de ella, que pasó a su lado sin darse cuenta de nada. Caminó hacia ella. - ¿Hablamos? Ella no pronunció palabra se ahogaban en su garganta, ademas trataba por todos los medios que sus ojos no se humedecieran. Se sentó junto a la ventana, él la siguió. El camarero la reconoció y dijo: - Hoy has cambiado de lugar!! lo de siempre verdad? Ella intentando esbozar una sonrisa, asintió con la cabeza. - Usted que tomará? - Un café solo, por favor. - Vienes a menudo aquí?, quiso saber Ella seguía sin responder, solo le miraba. - Déjame que te explique, es difícil hacerlo, no sin reconocer lo mal que me he portado mintiéndote. Por que recuerdo todo lo que te he dicho, mis respuestas a tus preguntas, mis excusas, mis ausencias, todo. Cuando te conocí y comenzamos a llevarnos tan bien, poco a poco quería más, necesitaba más de tí, las cosas iban muy bien, estaba feliz contigo. Pero meses ante...