Nostalgia de un beso

Intento rememorar el lugar donde volví a verte, solo sé que era un paseo, sobre el mar y se abría a un parque enorme, mis pasos me llevaron hasta donde estabas tú.

Apoyado en una pared, mirabas a unos niños correr.

Me acerqué incrédula ... 

- Jonas, ¿eres tú?

- Si, Meg ... casi gritó

- Que gusto verte, ya ha pasado mucho tiempo

- Si, mucho

- ¿Qué haces por aquí?

- He traído a mi hijo a jugar, ese pequeñín de ahí

- Tiene tus mismos ojos ... pero cuéntame que tal estás que hay de tu vida

- Pues no hay mucho que contar, ya sabes que me casé y formé una gran familia, trabajo en la universidad y poco más. Ven sentemos frente al estanque.

Nos acomodamos y hablamos de todo el tiempo pasado, yo con melancolía lo recordaba.

Hubo un instante que un impulso me hizo acariciarle su mejilla y le abracé.

Él me miró confundido.

- ¿Por qué lo haces? 

-  Tuve la necesidad de hacerlo, simplemente para revivir emociones

Me contempló fijamente, desvió su mirada hacia su hijo, se acercó y me abrazó.

Su calor inundo mi piel y me transportó, un par de minutos bastaron para detener el tiempo.

- ¿Qué nos pasó?, pregunté

- Pues no sé, tras nuestros breves momentos, nuestro primer beso

- Si, que Ana se molestó, respondí  ...  y reímos juntos.

- Después de eso, pensé en centrar mi vida, dejar de ser un errante en el amor, pero desapareciste tan pronto que no pude demostrarte que había cambiado, ahora estamos aquí.

- El destino es así, respondí, pero veo que eres feliz, yo alguna vez te recuerdo

- Yo también, el sentir tu corazón me ha sabido a poco

- ¿Qué propones?

- Ves ese jardín, frente a nosotros

- Ese que tiene esas enormes flores que con sus colores intensos resaltan entre lo verde de sus tallos.

- Daremos un paseo y entre su espesura,ocultos de miradas indiscretas te robaré un beso, que nos permita cerrar con ilusión este capítulo que dejamos inconcluso

Llamó a su pequeño indicándole por donde ir, nos dirigimos hacia la entrada de ese nuevo jardín, empezaba a llover y en el pasillo que lo recorría de lado a lado me tomó de la mano y yo me dejé guiar.