Y así empezó
Su piel
reaccionaba
al suave tacto
de sus manos
en la espalda
no le miraba
su rostro pedía más
de pronto
un beso descuidado
en su hombro
abrió esa
caja de Pandora.
Dejar libre la imaginación para escribir lo que a veces tenemos miedo de hacer.
Su piel
reaccionaba
al suave tacto
de sus manos
en la espalda
no le miraba
su rostro pedía más
de pronto
un beso descuidado
en su hombro
abrió esa
caja de Pandora.
Cuanto se hace de rogar esa caja de pandora
ResponderEliminarSi se abre, no hay marcha atrás ...
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