Lo que la escritura logra

 Sentada en silencio recorro los recuerdos de este lugar que me habla de ti de nuestros momentos besos intensos caricias ardientes y un poco más cuando la noche crecía al igual que nuestras ansias entregados al deseo lo prohibido quisimos disfrutando cada instante con el roce de la piel desatando ardientes ríos que nos llevaron a la locura haciendo imposible frenar la pasión.  

 Revoloteando por el mundo alzando el vuelo por doquier dejando atrás los problemas con muchas ganas de vivir. En esas idas y venidas entre mis alas se enredó un alma libre sin destino que de mí se enamoró. Jugando al amor todo surgió y sin pensarlo nuestro mundo creó. Ahora ... seguimos libres pero siempre atados a nuestros sentimientos que fueron nuestro comienzo.  

Comienzan a recolocarse las piezas de este puzzle que desperdigadas estaban por rumbos inimaginables donde parecía no encontrarse ya se intuye la imagen que formarán con paciencia para luego deleitarse con toda esa experiencia del tiempo invertido que no ha sido perdido porque al final se logró su objetivo.  

Como cambian las perspectivas hubo un tiempo que me sentía perdida si a tu lado no estaba extrañaba tu mirada y la sonrisa que me apasiona pasó el tiempo evolucionando todo dentro de mí te extraño ... obvio, siempre pero ya no estoy perdida estoy donde quiero estar recuerdo cada momento vivido y espero seguir creando muchos más a tu ritmo o al mío pero sin que ello se convierta en una necesidad inexorable que agobie los sentimientos y produzca una distancia inmensa donde nos perdamos para siempre.  

Altibajos de la vida que te obligan a replantearte esa estrategia que habías seguido pensando en su momento "es la mejor opción" avanzando el tiempo recorriendo distancias y no logras llegar a esa meta autoimpuesta dejando en el sendero ilusiones y sueños dándolos por perdidos, hasta que un destello de cordura te hace detenerte buscar otra alternativa y seguir adelante.  

Gélido viento que se cuela hasta las entrañas paralizando todo a su paso impidiendo sentir, vivir, soñar con todo aquello que un día parecía real y se ha convertido en un susurro. Necesita despertar con esa mirada que intensa acalora el alma alienta el corazón dándole la esperanza de renacer entre esos abrazos que saben a amor.    

Avanza a veces tan lento y otras tan deprisa que es imposible  distinguir donde empieza o donde acaba pero roba sueños esperanzas y recuerdos sin piedad alguna. ¿Qué instiga esos cambios? nunca lo podré saber solo viviré con el vaivén de esa marea de sentimientos acoplándome a ella para sobrevivir a su inclemencia sin desistir en el intento por la incertidumbre que genera cuando será su próxima embestida.  

Y si cae la máscara dejando al descubierto todo aquello que no querías aceptar embelesada por detalles que únicos parecían creyendo que demostraban un sentimiento intenso y puro. Y si por fin  de ese sueño despiertas dándote cuenta que era una fantasía más de lo que querías lograr pero como agua entre los dedos se escapan sin mirar atrás una vez más.  

A pesar del tiempo los sentimientos han despertado con el susurro de tu voz ese roce imperceptible de una mirada intensa el sabor de una sonrisa que hace temblar mis cimientos.   Vuelves con tal vehemencia que mi alma se desploma el corazón se acelera la piel se emociona esperando ansiosas caricias que creía que perdidas estaban cuando solo dormidas se hallaban.   

Lugares llenos de recuerdos donde cada esquina grita una anécdota haciéndote rememorar emociones sentidas esbozas una sonrisa como esa primera vez el corazón se acelera y tus poros gritan ¡amor! sientes con intensidad te emocionas sin pensar y te vuelves a enamorar.  

Descubrir cada día un nuevo detalle que me roba sonrisas alentándome a seguir por ese sendero donde se nos ha dado bien congeniar y conocernos aceptando los fallos engrandeciendo las virtudes saber que remamos  en la misma dirección sin prisas ni ataduras solo sentimientos reales y sinceros.  

Existen momentos fríos que cubren con su manto toda una existencia deteniendo  cualquier señal de vida pero siempre existe ese resquicio por donde te cuelas tu para dar calor a mis días dejando atrás la escarcha que retenía mis pasos devolviéndome esperanza y razón para seguir el latir de mi corazón.    

Caminando a solas con el murmullo de tu voz en mis oídos que se cuela muy dentro evocando esos recuerdos que viven impregnados en la piel nunca me abandonan y me hacen sentirte muy cerca.

Muy dentro de ti lo sabes lo sientes todo los sentimientos que me provocas cuando tu sonrisa ilumina tu rostro tu mirada opaca al sol tus caricias arrullan mi piel lo sabes lo sientes y aunque difícil descifrarlo un pequeño gesto basta para darme cuenta que también lo sientes por mí.  

Sin pensarlo me entregaste días llenos de felicidad de esperanza plena alegrando mi corazón, escuchando esa vocecilla repitiendo "te lo dije" era  y es real vibra muy dentro de mi, ya lo encuentro posible de que perdure un lustro más  esta historia de amor.  

Entre los árboles se cuela ese rayo de luz  que devuelve a mis días una esperanza perdida, pueda no ser eterna pero al fin de cuentas reaparece cuando un corazón lo necesita, deja atrás los miedos de esa niebla cegadora que impedía avanzar con pasos seguros.    

Vencer "esa sensación" ha sido siempre una tarea perdida. No, no pendiente ... sino perdida. Me rehúso siquiera a emprenderla, porque hace que los miedos afloren llevándome a un estado de desesperación. Psicoanalizando podría ser desde los años de infancia, adolescencia o que se yo, pero de adulta, se que no es. Ha sido un lastre que he arrastrado hasta hacerlo un tatuaje en mi piel, que se esconde bajo ella y decide cuando aparecer sin previo aviso, haciéndome caer de nuevo. Ojalá pudiera o mejor dicho quisiese buscar una solución permanente, para no sentir que todo está creado en arenas movedizas y pronto desaparecerá. Espero que en algún momento, día o lustro, esto pueda acabar.    

Cambian los días al mismo ritmo que mis estados donde a veces los grises se vuelven colores y viceversa  esperando una luz que llegue a mi soledad o un silencio que calme mis agobios da igual al final siempre levantando la mirada volverá ese cielo que azul se muestra regresando mi calma.